¿Qué es el proceso de compostaje?
Los bioplásticos compostables se degradan en ambientes de compostabilidad concretos. Existen diferentes tipos de compostaje y diferentes factores que influyen en el proceso de compostabilidad de este tipo de materiales.
En el post de hoy hablamos del proceso de compostaje, fases del compostaje y de las diferencias entre compostaje doméstico e industrial.
¿Qué es el compostaje?
El compostaje es la descomposición de la materia orgánica por una serie de organismos tales como bacterias y hongos que tiene como resultado un producto fertilizante y regenerador del suelo denominado «compost».
Se trata del resultado de un proceso biológico cuya principal finalidad es estabilizar e higienizar los residuos orgánicos y generar como resultado un fertilizante de gran calidad.
Esta regeneración del suelo se debe a que, en los suelos degradados, el compost aumenta la biomasa microbiana y la materia orgánica. Podemos decir entonces que, al volver a activarse todos los ciclos biológicos del suelo, se le devuelve la vida al terreno.
El compostaje es un proceso biológico
Según el Manual del Compostaje de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el compostaje es la mezcla de materia orgánica en descomposición en condiciones aeróbicas que se emplea para mejorar la estructura del suelo y proporcionar nutrientes.
El proceso del compostaje es un proceso controlado que se realiza en presencia de oxígeno y humedad, libera calor y degrada la materia orgánica hasta convertirla en un material estable y útil como abono.
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Compostaje doméstico VS Compostaje Industrial
Compostaje doméstico
El proceso del compostaje doméstico se realiza normalmente en composteras de jardín. Resulta un método de compostaje muy llamativo para muchos llevar a cabo el proceso para conseguir su propio compost. Sin embargo, las condiciones de compostabilidad domésticas no son fáciles de controlar. Esto se debe a que las temperaturas y el nivel de humedad son mucho más variables y bajas que en una planta de compostaje industrial. El motivo de esto es que, a diferencia de en una planta de compostaje industrial, en el compostaje doméstico los volúmenes son mucho más bajos y se producen de forma asidua pérdidas de calor que impiden que el proceso se lleve a cabo de forma estable.
Compostaje industrial
El proceso de compostaje industrial se realiza en plantas especializadas para este procedimiento, por lo que las condiciones de compostabilidad están mucho más controladas y, al contrario que durante el compostaje doméstico, no se producen pérdidas de calor ni cambios bruscos de humedad.
Además, en las plantas de compostaje encontramos una mayor cantidad de residuos que incluyen una gran carga y diversidad de microorganismos, lo que disminuye los tiempos de biodegradación y consigue que el proceso sea más rápido y eficaz.
Fases en el proceso de compostaje
El compostaje es un proceso que sigue una serie de fases en las que intervienen diferentes agentes y factores. A continuación, hablamos de cada una de ellas.
Fase 1. Mesófila
El proceso del compostaje inicia con una temperatura ambiente. Sin embargo, gracias a la acción de los diferentes microorganismos la temperatura va, poco a poco, aumentando.
Esta fase consiste en el periodo de aclimatación de los microorganismos al medio, donde se multiplican y colonizan utilizando las fuentes de carbono y nitrógeno sencillas. Gracias a esto, la temperatura va de los 20º – 40º hasta alcanzar los 50º y 70º. Esta fase tiene una duración de entre 2 y 8 días.
Fase 2. Termófila
Una vez superada la temperatura de los 45º, los organismos mesófilos desaparecen y son sustituidos por los microorganismos termófilos, que soportan hasta 100º de temperatura. Los termófilos son mayoritariamente bacterias con capacidad de descomponer fuentes complejas de carbono, por lo que son capaces de degradar rápidamente los materiales añadidos en la mezcla.
Durante la fase termófila del compostaje, la mezcla se debe mover y airear recurrentemente con la principal finalidad de aportar oxígeno a los microorganismos que se encuentran en ella y que así puedan seguir descomponiéndola.
Estas temperaturas altas se mantienen mientras continúa el proceso de descomposición de la materia orgánica que puede durar varios meses. Además, en temperaturas superiores a los 45º se destruye cualquier tipo de contaminante biológico, lo que contribuye a la higienización de la mezcla. Durante este periodo desaparecen patógenos como Salmonella y esporas de hongos.
Fase 3. Enfriamiento
Al haberse transformado prácticamente la totalidad de la materia orgánica, la temperatura vuelve a descender. En ese momento, se debe decidir si se gira la mezcla para homogeneizarla y volver a elevar la temperatura o dejar que siga disminuyendo hasta los 40º C – 45º C. Llegados a esta temperatura, más cercana a la temperatura ambiente, los organismos mesófilos vuelven a activarse.
Fase 4. Maduración
Tras un periodo de enfriamiento y una vez la producción del compost ha finalizado, llega la fase de maduración, que también se produce a temperatura ambiente y permite la consolidación de nuevas moléculas.
Durante un periodo de varios meses que corresponde a una fermentación lenta, se degrada la parte menos biodegradable de la materia orgánica. Aquí, el compost madura y permite la consolidación de nuevas moléculas, sumando nuevas poblaciones microbianas así como nuevos microorganismos como anélidos, insectos o ácaros que completan la transformación.
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¿Qué materiales se usan para el compostaje?
Según reglamentos europeos, el compostaje puede llevarse a cabo a partir de diferentes tipos de materiales.
- Estiércoles y purines
- Restos forestales, como la leña
- Restos de la industria agroalimentaria, como los residuos que se generan tras la elaboración del vino
- Restos agrícolas
- Envases compostables como los fabricados a partir de materiales ZIMIA.
¿Sabías que un estudio de la Universidad de Alcalá y la Universidad Autónoma de Madrid ha demostrado que los bioplásticos compostables se degradan de forma total y completa durante el proceso de compostaje? Esto significa que los compostables no dejan microplásticos.
Usos y beneficios del compostaje
El compostaje está cada vez más presente en la nueva economía circular. De hecho, solamente en la Unión Europea se producen cada año alrededor de 12 millones de toneladas de compost a partir de residuos municipales. Según el informe Bio-waste in Europe de la Agencia Europea del Medioambiente, esta práctica se realiza especialmente en países del centro de nuestro continente como Bélgica, Alemania, Austria, Italia y Países Bajos.
En España, según los datos del Ministerio de Transición Ecológica, cada año se compostan más de 3.5 millones de toneladas de residuos orgánicos, donde principalmente el destino de este compost es, de nuevo, la agricultura.
El compost creado a partir del proceso de compostaje, puede ser utilizado como material fertilizante y para la preparación de sustratos de cultivo al mezclarlo con otros materiales como la turba o la perlita.
También en el contexto de la agricultura, el compost puede ser clave para la agricultura ecológica y para la recuperación de suelos y terrenos degradados. Debido a acciones llevadas a cabo por el ser humano, como el uso de maquinaria de alta potencia y el abonado químico, se ha empobrecido la calidad de nuestros suelos. En este caso, los residuos orgánicos pueden ayudar a restaurar estas tierras.
El artículo «El compostaje en agricultura ecológica» publicado en la revista Producción Agraria Ecológica, recoge los beneficios que el compost tiene para el suelo:
- Aporta nuevos nutrientes y moviliza los existentes en el suelo
- Aumenta la actividad microbiana y dinamiza los ciclos biológicos del suelo
- Mejora la retención y el almacenamiento de agua
- Favorece el crecimiento de las raíces
- Permite una mayor presencia de oxígeno
- Ayuda al control natural de las plagas
¿Cómo diferenciar los envases aptos para el compostaje?
Los envases compostables son aquellos que cumplen con la normativa EN 13432. Esta norma europea tiene como principal finalidad establecer una serie de requisitos y condiciones que los envases deben superar. Entre otros, dos de las principales exigencias de esta norma son:
- Degradación del material como máximo en 6 meses del 90% al ser sometido a un ambiente rico en dióxido de carbono.
- El material no debe tener efectos negativos ni disminuir la calidad del compost generado durante el proceso de compostaje.
Si quieres saber más sobre esta norma, te dejamos este post con todo lo que debes saber sobre la norma EN 13432.
Para saber qué envases cumplen con esta normativa, existen organismos de certificación como TUV Austria, que otorgan el sello Ok Compost Home para envases y embalajes aptos para compostaje doméstico y Ok Compost Industrial para aquellos que deben ser depositados en el contenedor de residuos orgánicos para ser gestionados en una planta de compostaje industrial.